Lavadora ultrasonidos industrial

Lavado y desengrase de piezas con lavadoras ultrasónicas

Coniex diseñamos y suministramos lavadoras de ultrasonidos para la limpieza de piezas industriales. Disponemos de lavadoras ultrasónicas industriales de diversos tamaños para el lavado de distintos tipos de piezas. El tamaño y configuración de cada equipo puede personalizarse para ajustarse a las necesidades de cada cliente.

Las lavadoras de ultrasonidos son equipos de gran versatilidad. En Coniex podemos suministrar equipos de tamaño reducido (que pueden llegar a ser portátiles) para el lavado de piezas delicadas y de pequeño tamaño, o equipos de gran envergadura que pueden tratar piezas de gran tamaño y complejidad, como motores o piezas navales.

Las lavadoras de ultrasonidos industriales aportan un alto grado de innovación respecto a otras alternativas disponibles en el mercado. Es por ello que estos equipos ofrecen una serie de características y ventajas que no se pueden obtener con otro tipo de lavadoras:

    • No se emplean ácidos, u otros productos de limpieza corrosivos.
    • Permiten una limpieza completa y homogénea de las piezas, independientemente de su forma.
    • Máximas garantías de que las piezas no sufrirán ningún daño o contaminación.
    • Consumo eléctrico inferior al resto de equipos de lavado de piezas.
    • Tecnología respetuosa con el medio ambiente y la salud de los empleados.
    • Reducción de los costes de mano de obra.
    • Ahorro en el tiempo de limpieza.

Independientemente de su tamaño, las lavadoras ultrasónicas acostumbran a operar de forma muy similar. Aunque todos los equipos tienen como objetivo final el lavado y desengrase de las piezas, cada modelo puede satisfacer necesidades específicas diferentes.

Los equipos de limpieza por ultrasonido de CONIEX ofrecen la eliminación completa y rápida de toda suciedad y gérmenes, así como de otros contaminantes.

Lavado por ultrasonidos

La limpieza por ultrasonidos es un proceso al que se someten las piezas para la eliminación superficial de suciedad, como aceites, emulsiones de mecanización, grasas, pastas, pulido, oxidación, etc. Esta limpieza es llevada a cabo mediante un dispositivo que limpia los artículos usando ultrasonido y agua, o un solvente de limpieza apropiado.

Las piezas que han de ser lavadas y desengrasadas se colocan en un tanque de agua que se agita con ondas sonoras de alta frecuencia, inaudibles para el ser humano.

El tiempo de limpieza de la máquina de ultrasonido y otros limpiadores ultrasónicos varía considerablemente. La duración del proceso depende del nivel de suciedad y contaminación de las piezas que han de ser tratadas. Pese a que muchas piezas pueden quedar limpias en unos pocos segundos, la media de tiempo necesaria para asegurar una correcta limpieza varía de 2 a 10 minutos. Además, para garantizar que los contaminantes son eliminados por completo es posible que se haya de repetir el proceso de limpieza por ultrasonido más de una vez.

Este método de lavado industrial logra unos excelentes acabados, difíciles de obtener con otras tecnologías, y permite un alto grado de versatilidad para cumplir con las necesidades específicas de cada aplicación.

Las lavadoras de ultrasonidos industriales son adecuadas para tratar una gran variedad de materiales, especialmente metal y plástico.

Funcionamiento

Los parámetros de la operación de limpieza se programan a través de una pantalla táctil con un sencillo sistema de comandos.

Tras ajustar los parámetros de limpieza, se procede a verter el detergente, o producto de limpieza. Seguidamente, se deben seleccionar el programa y la temperatura de operación, que dependerá de la profundidad a la que se quiere sumergir la pieza.

La última parte de este proceso inicial es la colocación de la pieza sobre la bandeja y proceder a su inmersión.

Las lavadoras de ultrasonidos cuentan con un temporizador, por lo que el proceso de lavado puede ser detenido manualmente, o cuando el tiempo programado en el temporizador llegue a su fin.

La plataforma sobre la que se depositan las piezas se sumerge automáticamente, o manualmente, en el agua caliente, que ya contiene el detergente, y gracias al poder de los ultrasonidos todas las superficies de las piezas se limpian de forma eficaz. El ciclo de lavado se lleva a cabo de acuerdo con la programación que se ha configurado anteriormente en la pantalla táctil.

Una vez finalizado el lavado, se puede observar cómo toda la suciedad, espuma y residuos que se han eliminado de la pieza permanecen flotando en la superficie. Esta suciedad latente es retirada del equipo gracias a un sistema de aspersión que, gracias a una bomba de recirculación, extrae los residuos y los deposita en un depósito adicional de decantación que también ha de ser vaciado.

Debido a que la pieza continua en el interior del equipo, es aconsejable llevar a cabo un proceso de circulación de agua que permita eliminar cualquier tipo de suciedad o impureza que se haya podido depositar sobre la pieza de nuevo. Un filtro de alta eficacia permite la filtración del líquido para retirar los pequeños elementos sólidos como las virutas. Este mismo proceso permite eliminar la suciedad del fondo y paredes de la lavadora.  

Finalmente, se procede a la apertura del equipo y la extracción de la pieza. Para ello, únicamente se ha de elevar la bandeja sumergida y ya podemos disponer de la pieza completamente libre de suciedad e impurezas con un excelente acabado.

Sectores

Los sectores que más habitualmente emplean la limpieza por ultrasonido son los siguientes:

    • Alimentación
    • Automoción
    • Aeronáutica
    • Naval
    • Electrónica
    • Dental
    • Material quirúrgico
    • Química
    • Relojería y Joyería
    • Productos farmacéuticos
    • Prototipaje y moldes de inyección
    • Plantas de energía y cogeneración.
    • Talleres de mecanizado.

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